Thursday 18 March 2021

¿Fin de la vida del golfo de California?

El año de confinamiento por la pandemia ha exacerbado las crisis económicas y ambientales en las cuales vivimos. Las cadenas de oferta se han debilitado y los bienes han escaseado, la demanda por los productos, esta situación es crítica en las poblaciones marginales.

Vaquita/Formato7
En el alto golfo de California la vida es cada vez más precaria y difícil. Hay dos poblados que están en el epicentro (¿doble?) de esta crisis: San Felipe, Baja California y Santa Clara del Golfo, Sonora. Estos pueblos que viven principalmente de la pesca sufren las consecuencias del descuido de políticos que han ignorado e ignoran sus responsabilidades hacia los ciudadanos que los eligieron. Ambas comunidades utilizan la Reserva de la Biósfera del alto golfo de California para ganarse su sustento. Una reserva de la biosfera supone el uso sustentable de sus recursos con la subsecuente mejora de la calidad de vida de quienes la aprovechan.


Los administradores de la reserva hacen grandes esfuerzos para conservar la reserva pese a los magros presupuestos que aquejan a esta y todas las otras áreas naturales protegidas del país. El problema no es reciente, jamás han recibido la atención y prioridad que merecen para la conservación de la megabiodiversidad mexicana.


Las pesquerías del algo golfo incluyen camarones, tiburones y peces de agalla, excluyendo a la totoaba, una especie protegida. Bajo un esquema de reserva de la biosfera las comunidades deberían tener una forma de vida confiable y que les proporcionara una vida confortable, pero no es así.


Vejigas totoaba/formato7
Dos especies son la causa de las controversias y enfrentamientos en el alto golfo. Una  razón para la creación de la reserva fue la de la protección de la Vaquita marina (Phoecena sinus), el mamífero marino endémico de la región. La Vaquita es el cetáceo más pequeño y amenazado del mundo, descrito apenas en 1958, jamás ha sido una especie común o abundante, por naturaleza es ya especie amenazada. El último reporte de los expertos en Vaquita ponen su número muy cercano a la docena, un número que parece llevarla a la extinción si no se toman medidas extraordinarias. La muerte incidental en las redes de pescadores legales e ilegales en el alto golfo de California es su amenaza mayor. No hay evidencia publicada que la reducción del flujo del río Colorado al alto golfo sea causa de la presencia de nuevos depredadores en el área o de la disminución de su población. El programa de monitorización acústica nos ha ayudado a entender la distribución y la abundancia de este animal. Continuarlo es esencial para garantizar un futuro a esta especie y evitar el colapso económico y el embargo  de productos pesqueros del golfo de California a los Estados Unidos.


La totoaba (Totoaba macdonaldii) es un pez que alguna vez fue muy abundante en el golfo de California y proveía de alimentación e ingresos a las familias de pescadores. La sobrepesca logró que se declarada amenazada. En el mar de China la sobrepesca de una especie similar, considerara erróneamente como afrodisiaca, ha traído como consecuencia que los buches (vejigas natatorias—órganos que controlan el nivel de flotación del pescado) se hayan convertido en objeto de contrabando. La llegada de los buches al mercado chino sólo puede ser explicada por una red de corrupción que domina desde los pescadores hasta los agentes de seguridad y aduanales de las playas del golfo hasta las cocinas del mercado oriental.


Totoaba/Excelsior


La consecuencia más dramática y posible de la presencia de redes de pesca legales e ilegales y la muerte incidental de la Vaquita es el colapso económico de las pesquerías locales. Bajo el Marine Mammal Protection Act (Ley de Protección de los Mamíferos Marinos) de los Estados Unidos se puede embargar al camarón y otras pesquerías del golfo de California y después de todas las aguas mexicanas. Un embargo así también defiende los intereses pesqueros de los Estados Unidos; los atuneros siguen buscando que se levante el suyo ya que no hay muerte significativa de delfines en las redes atuneras mexicanas.


Sin la intervención real y comprometida política y económicamente de los tres niveles de gobierno en las comunidades pesqueras del alto golfo de California tanto las pesquerías, incluyendo a los pescadores, como la Vaquita morirán en el abandono. Es posible reestablecer mediante el diálogo, la  negociación con todas las partes interesadas la gobernanza, la economía y la civilidad. Aún es posible hacer de esta reserva de la biosfera un ejemplo mundial del desarrollo sustentable.

Sunday 7 March 2021

Pandemia, emisiones y sociedad



wikipedia

En estos tiempos aciagos donde la pandemia nos ha obligado a reducir nuestros movimientos fuera de casa en aras de la salud. Esto ha reducido nuestro uso de vehículos de combustión interna. Por lo tanto, estamos contentos de que la contribución global a la liberación de gases de efecto invernadero (GEI), principalmente CO2 ha disminuido con la pandemia. Los medios muestran imágenes de cielos azules. Sin embargo la reducción de las emisiones no es tan grande como nos gustaría ni significa que hay más fuentes de energía renovable alimentando nuestro gran apetito energético. 


Los alimentos y demás bienes de consumo esencial o suntuario siguen moviéndose del campo y las fábricas a los consumidores, a veces como pescados que viajan dentro de la comarca o del estado, la mayoría de las veces dentro del país en como los chiles o aguacates, o cruzando una o más fronteras como la mayoría de nuestros vehículos y en ocasiones son ultramarinos que han viajado decenas de miles de kilómetros de una parte del mundo, como pueden ser uvas chilenas en tu mesa o electrónicos orientales en tu escritorio.

climatenewsnetwork


Aunque el turismo ha bajado en todo el mundo y muchas compañías de aviación y la industria hotelera están colapsando económicamente, seguimos viajando para trabajar, estudiar, mantenernos en contacto con familia y amigos y vacacionar. Todos estos viajes significan emisiones de CO2 a la atmósfera.


La generación de gases de efecto invernadero es un negocio, tal vez el más importante de la economía mundial. La extracción y uso de combustibles fósiles impulsa nuestra economía. A medida que ampliemos el uso de energías alternativas en todos los aspectos de nuestra vida y cambiemos nuestros patrones de consumo podremos evitar la adicción a la producción de GEI. Estos gases también impulsan los conflictos mundiales, no sólo por su control, política o ganacias, también como motor de la industria militar global.


Nos olvidamos de los miles de millones de dólares que se colectan como impuestos se otorgan en préstamos y se gastan en la industria militar y en los ejércitos, guerrillas y grupos terroristas. Este capital se usa para fabricar y mover armas, transportar soldados, entrar en combate o defenderse del enemigo desde un cuartel o un campamento. Todas estas acciones y actividades logísticas son fuente de GEI con consecuencias graves no sólo la emisión de GEI, sino también por la devastación que las guerras causan en humanos, el resto de los seres vivos y el ambiente


La pandemia ha puesto presión sobre los gobiernos, sus economías y sistemas de salud de todo el mundo. La variación y contraste de las respuestas es notable. Algunos, como México, Brasil y los Estados Unidos han minimizado el problema. En cambio, en Corea del Sur, Australia, la Union Europea y Nueva Zelanda han hecho esfuerzos extraordinarios para disminuir los costos humanos.


SARS-Cov-2 se transmite por contacto cercano e invade el cuerpo a través de las vías respiratorias, donde crea el mayor daño, pero no el único. Para evitar el contagio hay que aislarlo. Esto nos ha forzado a quedarnos en casa si es posible. Aunque este aislamiento ha tenido un gran costo económico, no quiero saber las consecuencias económicas y humanas de tener aún más muertos y enfermos.


 Ahora llamamos trabajadores esenciales a quienes siempre han tenido trabajos muchas veces inseguros y otras mal pagados. Trabajadores que recogen basura, manejan transporte público, trabajan en tiendas de autoservicio, bancos, laboratorios, consultorios y hospitales. También incluyen a policías, servicios paramédicos y de bomberos. Que no se nos olvide que la sociedad ha seguido funcionando por sus sacrificios y porque las más de las veces no tenían otra opción que sacrificarse, arriesgando a infectarse con SARS-Cov-2 en todo momento. Que tampoco se nos olvide que muchos cayeron y seguirán cayendo mientras toda la población no tome en serio esta amenaza y, además, esté vacunada. 

globaljustice.org


Los trabajadores esenciales merecen mejores recompensas y reconocimiento no sólo en tiempos como estos sino siempre. Un salario y una forma de vida de acuerdo a sus responsabilidades. 


Con el mundo funcionado a menos de su capacidad económica y de fuerza de trabajo total, ¿cómo vamos a aprovechar estos momentos para cambiar nuestra forma de vida y la eonomía global? Las consecuencias sociales y económicas de Covid-19 no deben ser la excusa para mantener la vida como es sino la oportunidad para empezar a construir un futuro mas sustentable y egalitario.