La lectura de 1984, Granja Animal y otras obras de George Orwell nos confirma que su visión sigue vigente. Su estilo de escritura no es elegante, sus escritos se caracterizan por su simpleza, claridad, honestidad del lenguaje y análisis del tema. Su máxima contribución al lenguaje, es la invención del Newspeak, donde el gobierno central crea un lenguaje simple y ambiguo que perpetua la explotación ideológica. La ficción de Orwell es una consecuencia lógica de sus reportajes y ensayos, vivió la guerra civil española como combatiente y París y Londres los sobrevivió como vago y subempleado.
La intolerancia acecha y confunde nuestra vida socia, política y religiosa. El fundamentalismo islámico invade nuestras noticias, pero la intolerancia religiosa e ideológica y la xenofobia son comunes. Una vista a nuestro alrededor y una reflexión son mas que suficientes para identificar estos comportamientos en nuestra vida diaria.
Valga un ejemplo mas que obvio, no por eso sin consecuencias para nuestras cotidianeidad. En países islámicos donde Al Qaeda, el Califato de ISIS o cualquier de sus aliados están presentes a hay una campaña contra la vida de las mujeres que vacunan a infantes contra polio. Estos asesinatos misóginos, que acusan de infiel a quien busca el bienestar social, multiplican la pobreza y las víctimas de polio en lugares sin asistencia médica o una red de ayuda y bienestar. Estos asesinatos de mujeres no son muy diferente, en sus consecuencias, del rechazo actual en países del primer mundo de la vacunación infantil.
Esta generación de nuevos padres del primer mundo, vacunados cuando infantes, no conoce las enfermedades que aquejaron a sus padres y abuelos, viruela, sarampión, polio, etc. Por no tener un conocimiento básico del funcionamiento de las vacunas o una actitud crítica hacia la información que circula en internet, objetan que sus hijos se vacunen. Alguien, sin verificar, les informó que las vacunas infantiles causan autismo. El creer ciegamente en islam o en internet condenan a una vida limitada a muchos infantes. Estos comportamientos obscurantistas tienen las mismas consecuencias, están creando nuevas epidemias de enfermedades que creíamos controladas.
La guerra real e ideológica en Ucrania entre Rusia y la OTAN, las alianzas cambiantes y las consecuencias de destrucción por la guerra también son noticias de primera plana. MI amigo de hoy es mi enemigo de mañana, pero en la próxima tormenta política la situación será diferente. Lo único que no cambia es que quienes no tienen, se quedan con menos y quienes tienen encuentran la fórmula para acumular mas.
Hay esperanza, la ilustró Salvador Díaz Mirón (1853-1928) poeta mexicano en Asonancias:
Sabedlo, soberanos y vasallos,\ próceres y mendigos\ que nadie tendrá derecho a lo superfluo\
mientras alguien carezca de lo estricto. Lo que llamamos caridad \y es ahora tan solo un móvil íntimo\ será en un porvenir lejano o próximo\ el resultado del deber escrito. Y la equidad se sentará en el trono\ del que huya el egoismo\ y a la ley del embudo, que hoy impera\ sucederá la ley del equilibrio.
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