Monday 7 December 2009

¿A donde va la Ciencia?

Es claro para quienes trabajamos en las ciencias en México que el país no tiene una política sobre la ciencia, su sabor o su tendencia. Cada sexenio presidencial surgen, o no, ideas diferentes (no necesariamente nuevas u originales) sobre qué papel pueden jugar la investigación científica y la educación superior en el desarrollo de la sociedad.
En México, no existe una política de nación, y vale la pena preguntarse: ¿cómo ha sido el trato de la ciencia en México? A través de la transición de un sistema unipartidista del PRI a un gobierno que se enfrenta tanto a cámaras legislativas federales como a gobernadores, podemos comparar el trato dado a la investigación científica. Durante los gobiernos priistas se entendió que financiar la actividad científica tenía dos papeles en la sociedad mexicana: mantener a una clase inteligente e inquieta entretenida con sus juguetes favoritos, con poco tiempo y sin ideología convincente para organizarse políticamente y dar una imagen de país en desarrollo esforzado por crear ciencia y tecnologías propias. Esto último es bien visto por los diferentes bancos internacionales que nos ayudan a endeudarnos como en cualquier tienda de raya.
Los gobiernos panistas, acostumbrados a ser oposición y no proposición, están aprendiendo a gobernar a tontas y locas sin un proyecto claro de país. Estos gobernantes, entrenados a pensar como industriales o inversionistas, pero no necesariamente empresarios, tienen una agenda de gobierno limitada por sus percepciones conservadoras y limitando a lo que debe ser el México del siglo XXI.
​ Como industriales sin un plan empresarial de investigación y desarrollo, están acostumbrados a importar los modelos económicos e insumos que se necesiten y no se produzcan aquí. Este es un factor comun entre los gobiernos y legisladores panistas que se dicen defender los intereses y el bienestar de la nación.
Como consecuencia de no tener un plan y adquirir fuera del país lo que necesitan para su desarrollo, no han sabido que hacer ni con la educación superior pública ni con la investigación científica. Estas actividades tradicionalmente son patrocinadas por los gobiernos tanto como una forma de superación social, como por el ideal de una autosuficencia razonable de productos y conocimientos. Esta yuxtaposición ideológica les causa un dilema, pues la investigación y la educación son parte del gobierno e indicadores de desarrollo, pero va en contra de los principios prácticos de dependencia.
¿Cómo han solucionado este dilema los dos presidentes panistas? Vicente Fox desvarió entre ignorar el problema y tratar de poner a la venta o cerrar centros federales de investigación sin el prestigio de los centros CONACyT. Tanto los Centros Regionales de Investigación Pesquera (CRIP) como el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP) estuvieron a punto de venderse como centros a privatizar o cascarones para ocupar. Los directores de CONACyT del gobierno de Fox pasaron sin pena ni gloria.
El gobierno actual es más proactivo en demostrar su desprecio y desconocimiento de las labores de investigación y educación superior. El titular del CONACyT Juan Carlos Romero Hicks ha sido muy claro en su actitud. Primero nos hizo saber que la ciencia no es relevante para el desarrollo de México, la pobreza, la inseguridad y la legalidad han sido prioritarias. Jamás se le ocurrió que la investigación científica sirve para resolver estos y muchos problemas más. En una segunda visita a Baja California del Sr. Romero Hicks nos vino a preguntar como se deberían resolver los problemas administrativos de la ciencia. Quiero suponer que el fue contratado por que tenía experiencia similar, fue rector de la Universidad de Guanajuato (ahora autónoma) o por que era capaz de desarrollar un buen plan de administración de la ciencia en México.
Ahora el gobierno ha decidido que tal vez la investigación y la educación pueden cumplir un papel no diferente del que este cumple en el país. Trabajar no para la nación, no para el bien social, sino para la industria ¿nacional? de forma que la industria y pocos mas reciban los beneficios de un sistema de investigación y educación superior pagado por todos los mexicanos.
No sólo la nueva ley de Centros Públicos de Investigación y la Ley de Ciencia y Tecnología apuntan en esa dirección. Los nuevos estatutos de personal académico que todos y cada uno de los centros CONACyT deben adoptar en 2010 apuntan a que debemos procurar trabajar estrechamente con la industria (vinculación en el dialecto de la burocracia CONACyT) para ser meritorios de las recompensas que trabajar para la industria trae. Los programas de ciencia básica, fondos mixtos con estados o fondos sectoriales con otras secretarías perderán importancia en cuanto no favorezcan a la industria.
Esta política federal explica los nombramientos por parte del C. Presidente Felipe Calderón Hinojosa del nuevo rector de la UAM, el Dr. Enrique Pablo Alfonso Fernández Fassnacth y de la nueva directora general del IPN, la Dra. Yoloxóchitl Bustamante Diéz. Lo nombramientos tienen dos características comunes. Ambos (nótese que no son cuatro) sirvieron al gobierno federal en la SEP y han trabajado para la industria. Estas características nos dan una señal muy clara de como entiende este gobierno a la educación superior y la investigación y cual es su tendencia hacia estas dos tareas. Podemos suponer que las renovaciones o nuevos nombramientos en instituciones de investigación y de educación superior con injerencia federal tendrán cuando menos una de las dos caraterísticas de los directivos arriba mencionados.
¿Que consecuencias traerá esto a la investigación, la ciencia básica y el desarrollo del país? La mas obvia es que la industria tendrá un departamento de Investigación y Desarrollo muy barato. La plana física y los investigadores ya existen, los industriales simplemente tienen que decir que problema les gustaría resolver y pagar barato por ello. Pero deben convencerse que esto es mejor que importar ciencia y tecnología.
Otra consecuencia es que habrá dos tipos de investigadores los que quieren y pueden trabajar para la industria y los que no quieren o pueden trabajar para la industria. Una vez mas, las prioridades de investigación estarán determinadas más por las necesidades a corto plazo de un gobierno y sus aliados, que por necesidades a largo plazo del país como la pobreza, la inseguridad y la ilegalidad.

3 comments:

  1. Hola Horacio

    Muy interesante el tema que tratas en esta ocasion y estoy de acuerdo en una buena parte de lo que analizas.

    Sin embargo, creo que hay una parte de tu premisa basica en la que creo que te equivocas. No creo que los gobiernos panistas, y en particular el de Calderon, no entienden o no saben la importancia de la educacion, la cultura y la investigacion. Lo saben muy bien y parte de la explicacion tu mismo la das cuando hablas de la direccion utilitaria que se le esta dando a la politica para la actividad cientifica.

    Lo saben muy bien. Saben que no les conviene tener enfrente interlocutores con capacidad intelectual cultivada pues seran los mas peligrosos opositores. Por ello la educacion y la cultura tienen que ser suprimidas si van mas alla de la educacion secundaria y las nachas de Alejandra Guzman.

    Por su parte, la investigacion cientifica como la habiamos conocido, la que fue tolerada y medio solapada por el PRI, no es que los panistas no sepan, es que no les interesa. Y aqui es donde creo que te equivocas. Los panistas si tienen proyecto de pais. Es un proyecto donde la mayoria de los mexicanos solo servimos para la maquila y para limpiarle el trasero a los estadounidenses (en otras palabras, para el turismo "all inclusive" y similares). En un proyecto de pais como ese, la investigacion sobre el numero de pelos en las patas de los acaros o el impulso gravitacional de una manchita en el radar de un telescopio de largo alcance, simplemente no sirven para nada y por lo tanto, no tienen cabida.

    Bajo este esquema, la supresion de educacion, cultura e investigacion, las cosas tienen mas sentido. Construye un pais lleno de sirvientes que no necesitan entender si una morula es un bebe o no, si el humano es completamente responsable del calentamiento global o no, la iglesia, el partido, o la "maestra" se encagaran de decirles eso y todo lo demas que necesitan saber. Abortar es malo, ser gay es malo, besarse en publico es malo... pero ser pederasta no es tan malo, los incrementos en los impuestos son para ayudar a los pobres...

    Desafortunadamente, bajo esta perspectiva, el panorama de la educacion, la cultura y la ciencia es muy gris. Un ignorante honesto tiene aun la posibilidad de ser educado. Alguien mal intencionado, con claridad en sus metas y solido en sus convicciones no va a cambiar su manera de pensar. Esta sera la situacion con los panistas y ese es el proyecto de pais que tienen para nosotros, sus sirvientes.

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  2. Hola Horacio
    Cuando veo tus escritos y recuedo tus clases me rememoras lo que Borges decía de Wilde -un tipo profundo que se esfuerza en parecer superficial-

    Respecto a tu entrada, ¿está peleado el resolver problemas a bajo costo para los amigos empresarios del panismo al tiempo que se aplica la ciencia? Tal vez ya no sea ciencia básica, pero es trabajo científico, son recursos humanos preparados y aplicados ¿no?

    Que las cosas tal vez no deberían ser así, es verdad, pero al paso que vamos creo que podrían ser mucho peor.

    Un saludo

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  3. Oishi,
    No están peleadas la ciencia y la "innovación". El dilema se encuentra en si son los empresarios que recibiran los beneficios o todos los que pagamos impuestos los que deben cubrir el costo de la "innovación". saludos

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