Aparecieron tres noticias disímiles sobre problemas en el trabajo científico y su patrocinio que merecen una reflexión: el retiro de 64 artículos de revistas científicas; pruebas incontrovertibles de plagio académico en México el reportaje de Zeta y Sin Embargo del supuesto mal uso de fondos destinados a la ciencia por Carlo Bonfante Olathe, titular de Desarrollo Económico de Baja California.
El trabajo en las ciencias es único por que es creativo y se hace en equipo para entender mejor el mundo. Es, como cualquier otro trabajo honesto, causa de orgullo y dignidad. Como los otros trabajos creativos, llena de satisfacción a sus autores.
El trabajo científico se ha mantenido honesto por que es revisado por pares. Esta revisión se da desde el momento en que un científico o un grupo de científicos somete una propuesta de investigación a una agencia que financie la propuesta. La decisión de la validez científica del tema es decidida por otros científicos. Una vez que se obtienen los resultados del trabajo es importante darlos a conocer y estos se someten en forma de un artículo a una revista científica especializada. Los resultados son enviados a pares que revisan el conocimiento del tema por los autores, la entereza y la veracidad de los resultados. Una vez que los pares han aprobado el artículo este es publicado.
El retiro esta semana de 64 artículos de 10 revistas por la editorial Springer se debió al abuso de confianza por parte de investigadores que sometieron sus artículos a diferentes revistas de Springer y sugirieron pares que revisaran sus artículos. Los correos electrónicos reportados para los pares resultaron ser de los autores mismos, por supuesto que acabaron con calificaciones excelentes al artículo. Springer no ha dado mas detalles de cuales de sus revistas o quienes estuvieron involucrados en el fraude, pero castigó la deshonestidad retirando las publicaciones. En la ciencia si no publicas, mueres. Quiero suponer que las instituciones de donde salieron estas investigaciones castigarán debidamente a sus autores.
A principios de este mes el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACyT) a través del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) retiró a Rodrigo Núñez Arancibia y Juan Pascual Gay la distinción como miembros del SNI tras haber probado el plagio académico. El SNI cuenta con mas de 23 mil miembros, la gran mayoría trabajamos honestamente.
A Carlo Bonfante se le presume de haber desviado 14 millones 213 mil 947 pesos en fondos CONACyT, utilizados para la investigación a empresas inexistentes o sin conexión con la ciencia o la innovación. Estas empresas, Zahorí S.A. de C.V., Hielo Cachanilla y Ultrakult, son del Sr. Bonfante, su esposa o sus parientes cercanos. Nuestros impuestos no están contribuyendo a la ciencia y la innovación en Baja California. Pedimos una investigación completa de estos supuestos fraudes para el buen futuro de Baja California y su ciencia.
El secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong ha reanudado sus pláticas con los padres de los Cuarenta y Tres desaparecidos de Ayotzinapa. ¿Relaciones públicas o solución real?
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