Sunday 17 February 2019

Antropocénica de la polinización.




Murciélago mayeguero
La polinización es el proceso por el cual las plantas con flor se fecundan y nos dan frutos tan diversos como la mazorca del maíz, los conos de los pinos o una vaina de vainilla. Las plantas no invierten en dotar de movimiento a los granos de polen. El polen, transportado por viento o animales, llega así al óvulo de otras plantas. En la polinización a través de un animal (insecto, ave o murciélago), las plantas invierten en la producción de néctar que los animales usan como fuente de energía. Ambos se benefician, pero ni la evolución, la ecología o la tragedia se detienen aquí.

Nuestras mesas están llenas de los productos de la polinización. Plantas, frutos y frutas. Agave (tequilas y mezcales), aguacate, almendra, calabacita, calabaza, durazno, flores de ornato, frijol, girasol, higo, jamaica, manzana, naranja, nuez, pepino, pera, piña, pistache, pitahaya, plátano, sandía, tés de flores y frutos, tomate, tuna, vainilla… Todo esto, todas las plantas con flor y todos sus frutos comestibles son producto de la polinización. Los ecosistemas y paisajes están llenos de flores y árboles que requieren de polinización para continuar su existencia. Muchas veces, como en el caso de las orquídeas, sólo hay una especie que los puede polinizar. En la mayoría de los casos el nectar está colocado al fondo de la flor para asegurar que el animal lleve el polen a la siguiente flor. Como diría Cándido en Voltaire, es el mejor de los mundos posibles. En realidad, la polinización es el producto de millones de años de evolución conjunta de plantas con flores e insectos y otros animales para crear una relación de beneficio mutuo, una forma de simbiosis. De esta simbiosis se beneficia el resto del ecosistema. Nosotros aprovechamos ese servicio ambiental para alimentarlos.
Escarabajo polinizador

¿Por qué un servicio ambiental? Porqué a un costo insignificante para nosotros obtenemos labor de polinización para producir frutos que sería imposible para trabajadores humanos hacer de forma tan eficiente y rápida. Tan importante es la polinización por abejas de la miel en la agricultura que en los Estados Unidos hay empresarios apicultores que viajan con sus panales rentándolos a los agricultores para los cultivos y árboles frutales sean polinizados. Además estos apicultores pueden vender la miel creada en los panales que transportan.

Hay menos abejas europeas y nativas polinizando el mundo. Algunas mueren, otras no llegan a tiempo. Si la tendencia continúa, que así parece, no habrá suficiente polarizadores y alimentos en nuestras mesas.

La capacidad de polinización se ha colapsado.
Abeja europea

El colapso es atribuible a causas antropogénicas. Una causa de la muerte de abejas son los pesticidas basados en neocotinoides. Muchas plantas de jardín han sido impregnadas con estos pesticidas que “controlan plagas”, pero también matan insectos benéficos. Sin la remoción de estos pesticidas seremos los creadores de la hambruna que nos puede matar.

Hay otra razón por las cual se están diezmando las abejas europeas en América. Al haberse originado de unos pocos panales su diversidad genética es baja. Esto las ha hecho susceptibles a una infección viral que se expande entre los apiarios de los Estados Unidos. La consecuencia es que la agricultura y la fruticultura dejen de producir los alimentos que llegan a nuestras mesas.
Colibrí de Ana

El cambio climático global ha causado que en el hemisferio Norte las temperaturas aumenten más pronto a principio de año, recortando el invierno y adelantando la época de floración (lo mismo sucede en el hemisferio sur a mitad de año). En consecuencia los insectos y otros animales emergerán de su hibernación o llegarán de los sitios a los que migraron en el invierno después de que las plantas que los nutren a principio de la temporada hayan floreado. Los polinizadores no encontrarán alimento en las flores, no habrá frutos en las plantas y no se generarán semillas para su reproducción. Consecuentemente los paisajes y ecosistemas se pauperizarán y se harán más frágiles a contingencias ambientales.

Árboles frutales y cultivos no polinizados se traducen en pérdidas en la economía agrícola y falta de alimento en nuestras mesas. Se desgarra la trama trófica (de alimentación) que mantiene el flujo de energía de los ecosistemas y los ecosistemas mismos. 


Además, pido que se encuentre y castigue a los culpables intelectuales y materiales de los asesinatos de Miroslava Breach y Javier Valdéz y el secuestro de los 43 normalistas de Ayotzinapa. ¡Viva la Comisión de la Verdad!

Saturday 2 February 2019

Codornices sonorenses

La Codorniz Mascarita de Sonora (Colinus virginianus ridhwayi) es una subespecie aislada (posiblemente desde el Pleistoceno, hace 12 mil años) de las otra muchas subespecies de codornices Cotuí (Colinus virginianus) que podemos encontrar en el centro-este de los Estados Unidos y en la vertiente este del territorio mexicano llegando a Morelos, Yucatán y Oaxaca donde son apreciadas como alimento y trofeos de caza.

Mascarita. airfresherclub.
La existencia de la Mascarita de Sonora se vio amenazada con la introducción como forraje del pasto buffel de África. Este desplazó a los pastos y hierbas nativas modificando el paisaje y el régimen de fuego y destruyendo el hábitat de la Mascarita. Es buen alimento para el ganado, pero las Mascarita no pueden comer sus semillas por las espinas que las envuelven. Agregado a este cambio alimentario, las sequías prolongadas pudieron haber acabado con sus alimentos y refugios. La última Codorniz Mascarita en vida libre se vio en Sonora en 2009, todos los intentos por detectarla por perros, escuchando sus llamados o avistándola han sido infructuosos; se le considera extinta en vida silvestre. Hay dos poblaciones en cautiverio, una en Buenos Aires National Wildlife Refuge, de la cual se trasladó una porción a Africam Safari en Valsequillo, Puebla. El fin último de estas poblaciones es reintroducirla a su ambiente.

La entrada del ganado a Sonora también ha tenido consecuencias para plantas y animales nativos. El tornillo, o mesquite, que se encontraba en las orillas de los arroyos fue trasladado a la mitad de los pastizales como parte de la boñiga, proveyendo una percha inigualable. Desde esta las aves de presa se lanzan sobre sus presas, especies de aves y mamíferos que quedan desprotegidos durante las migraciones y en el invierno.

Cresta doradda. ebird
Existen otras dos especies de codorniz en Sonora, la Codorniz de Gambel (Callipepla gambeli) y la Codorniz de Cresta Dorada (Callipepla douglasii). El pasto buffel y las sequías han tenido un efecto menor en su forma de vida. Siguen presentes, aunque aún no tenemos forma de saber si sus poblaciones se han mantenido estables, han disminuido o aumentado. Podemos sospechar que la introducción de ganado no les ha sido benéfica por las modificaciones de paisaje que implica: cambio de cobertura vegetal, apisonamiento de suelo, deslave de bancos de arroyos, construcción de cercas, facilitación de la depredación, etc. La persistencia de estas especies en los diferentes hábitats de Sonora indica que posiblemente son especies con un comportamiento más flexible ante los cambios creados por la introducción del pasto buffel y las sequías, o no estuvieron en el lugar equivocado en el momento equivocado evitando su extinción local como en el caso de a Mascarita. ¿Pueden sobrevivir los cambios en los hábitos de consumo de carne y el cambio climático global?



La demanda de carne de res disminuye en los Estados Unidos y en Europa pero su consumo ha aumentado en México, China e India. Si la demanda por carne sigue aumentando ¿tienen futuro los paisajes sonorenses y sus residentes naturales? Sí, si los rancheros alimentan a su ganado con pastos nativos. Aunque algunos ranchos han sido invadidos por el pasto buffel, en otros se han tomado medidas de manejo para reducir su presencia y alimentar al ganado con la flora nativa. La consecuencia sinérgica de ésta decisión es qué pueden regresar los paisajes previos a la introducción del pasto buffel, suponiendo que la mayoría de las especies pudieron refugiarse en algún lugar cercano a los ranchos donde se usó este pasto.

Gabmel. Wikipedia
El regreso de los pastos y otras plantas nativas ofrece una ganadería sustentable y el aprovechamiento de otros recursos. Ya diversos ranchos incluyen la cacería de venado bura (Odocoileus hemionus) entre sus actividades. Si conocemos las respuestas de las poblaciones de Codorniz ante los vaivenes climáticos y la reintroducción de pastos nativos podemos establecer tasas de aprovechamiento sustentable. Las codornices y sus huevos pueden volverse parte del menú estacional de restaurantes en los centros urbanos o de la cocina campirana en los mismos ranchos, o los adultos pueden ser cazados. El regreso y buen manejo de la vegetación nativa es una oportunidad para que los venados y las codornices proliferen y sean esenciales en la economía sonorense. 


Además, pido que se encuentre y castigue a los culpables intelectuales y materiales de los asesinatos de Miroslava Breach y Javier Valdéz y el secuestro de los 43 normalistas de Ayotzinapa. ¡Viva la Comisión de la Verdad!