Sunday 27 May 2018

¿Ciencia u opinión?

En democracias funcionales esperamos y suponemos que los tratados internacionales, las constituciones, leyes, normas y reglamentos que rigen las vidas de sus ciudadanos estén basados en hechos y datos, que estén basados en la razón, el sentido de justicia y en principios democráticos. No esperamos que se basen en caprichos de gobernantes, ideologías, favores a amigos incondicionales del gobierno u opiniones de lo que debería ser en contraste a lo que es. Estas bases atentan contra la convivencia, la democracia y las relaciones y discrepancias sanas entre diferentes sectores sociales.

En México tenemos reglamentos basados en opiniones y medidas calculadas para atraer a un electorado mal informado y para retrasar la democracia, las relaciones sociales y las discrepancias sanas. El Partido Verde Ecologista de México (PVEM) es el paradigma del origen de esta legislación. Proponen leyes, normas y reglamentos que brillan de lejos pero que con una inspección crítica dejan mucho que desear en la promoción de los valores de un partido verde: la democracia representativa transmitida a través de asambleas y foros; la oposición total a la pena de muerte y a los sistemas carceleros y el re-entrenamiento para una vida social basada en el desarrollo sustentable; la protección del medio ambiente mediante el aprovechamiento sustentable y la apropiación por los pueblos nativos y otros dueños comunitarios de las tierras en vez de una Ley General de Biodiversidad que encarcela en reservaciones a los pueblos nativos, quita la protección a muchas especies y ofrece el aprovechamiento no sustentable de la biodiversidad al capital extranjero.

Diario de Juárez
Esperamos que los partidos verdes defiendan los derechos de los animales, una vez que establezcan claramente cuáles son estos, como se determinan y se defienden. La discusión del caso de los derechos animales era controversial hace unas décadas, hoy son aceptados por un número importante humanos. 

Para que se respeten los derechos animales estos tiene que ser acompañados por leyes, normas y reglamentos. Proclamar que los derechos animales son iguales a los derechos humanos puede causar escozor, pero es un buen punto de partida para el establecimiento de reglas claras. Los animales no pueden  ejercer sus derechos ciudadanos, pero bajo una carga de igualdad de derechos si podemos esperar que los ciudadanos defiendan los derechos animales. Sin denigrar a animales o infantes, ambos requieren de la tutela y defensa de estos derechos por adultos racionales.

El PVEM utiliza la táctica de apoyo a la maternidad y el mole poblano para promover la legislación que brilla de lejos pero apesta después de una inspección detallada. ¿Quién de nosotros cree que la maternidad y el mole poblano son malos? ¿Quién puede objetar que son parte esencial de nuestra mexicanidad? Nadie.

Al proponer soluciones extremas, simplistas y populistas como la pena de muerte a los secuestradores, pone en jaque de maternidad y mole poblano a los otros partidos. Te ves mal si objetas al castigo a secuestradores, aunque el castigo sea cruel, inhumano y no admita equívocos. Si votas en contra, aseguras que te vaya mal por objetar castigar  conductas criminales y te ves blandengue por no ser duro, con exceso y sin sentido de justicia y perdón.

El principio de maternidad y mole poblano también ha sido abusado por el PVEM en el campo de los derechos animales. Es muy noble, aparentemente, prohibir el transporte de mamíferos marinos dentro del país, erradicar a los animales de los circos o enviar a santuarios a los delfines que habitan los acuarios de la Ciudad de México o del resto del país. 
Independientemente o a pesar de la libertad coartada de los animales de los circos, estos ya no pueden vivir en la naturaleza. Su regreso a sus lugares de origen no sólo es caro, también garantiza su incorporación rápida al almuerzo de depredadores salvajes. Liberarlos en la naturaleza en México implica la introducción de especies exóticas a nuestros ecosistemas. 

El estrés en mamíferos es una adaptación para reaccionar ante peligro inminente y mantener la vida, evitando ser almuerzo o perecer sin haber dejado suficiente dependencia para la continuidad de la especie. Si el estrés es continuo causa problemas fisiológicos que disminuyen la adecuación de un organismo para sobrevivir. En la opinión de muchos defensores de los derechos animales, el nado con delfines en acuarios causa estrés a los animales y su vida en los acuarios es miserable. 

Si esto es cierto, tenemos la capacidad de actuar para eliminar o disminuir el estrés y dar una mejor vida a los delfines. Antes de reaccionar a favor de esta opinión, debemos evaluar si los delfines en cautiverio están estresados por sus interacciones diarias y repetidas con humanos. La evidencia que dan los resultados de experimentos controlados en delfines de diversas edades, nacidos en cautiverio o en vida libre y en delfinarios cerrados o que comunican con el mar indican que no hay tal estrés. Los delfines que nadan con humanos no sufren.

Opinamos que el recibir a diferentes nadadores cada día les da un ambiente rico y estimulante, pero esto es sujeto de otro estudio.

Ya existe la posibilidad de nadar en la cercanía de delfines en vida libre, aprovechémosla.


Además pido que se encuentre y castigue a los culpables intelectuales y materiales de los asesinatos de Miroslava Breach y Javier Valdéz y el secuestro de los 43 normalistas de Ayotzinapa.






Sunday 13 May 2018

¿Dónde quedaron las aves?

En 1962 Rachel Carson escribió Silent Spring (La Primavera Silenciosa) donde advertía de los riesgos ambientales del uso indiscriminado de insecticidas en la agricultura. En un principio el público echó en saco roto sus advertencias y la industria química la acusaba de levantar falsos y atentar contra el progreso. Una vez que las consecuencias del DDT se manifestaron en el ambiente con la muerte de miles de pollos en el cascarón, Carson se convirtió en heroína y su libro en un manifiesto ambientalista. El DDT había adelgazado los cascarones de los huevos y estos se rompían bajo el peso de los padres mientras los empollaban. 

El DDT fue prohibido en el primer mundo pero, hasta donde sabemos, se sigue produciendo en San Diego, California y es exportado a los países en desarrollo donde generalmente es aplicado sin suficientes precauciones tanto para el ambiente como para los trabajadores del campo. 

Después de muchos años especies emblemáticas como el halcón peregrino y el águila de cabeza blanca se recuperan y sus poblaciones crecen, aunque los ambientes agrícolas o aguas abajo no están libres de los subproductos tóxicos derivados del DDT. 

Ni los plaguicidas son las únicas amenazas actuales sobre las aves, ni la lista siguiente es exclusiva.

Las aves playeras han disminuido sus poblaciones mundiales. Estas especies migratorias que en Norteamérica reparten su vida entre la reproducción en la parte norte de Alaska y el invierno en el trópico o subtrópico. Este grupo de aves de diferentes tamaños y formas de pico las observamos corriendo en las playas, planicies lodosas y campos agrícolas. No hay causa única, pero la desaparición de sitios de descanso en sus rutas migratorias debida al desarrollo urbano, portuario y turístico y el calentamiento global como causa de movimiento de los tiempos en los que hay alimentos críticos para la reproducción o la migración pudieran explicar gran parte de esta baja.

La gripe aviar y el virus del Nilo también son una amenaza sobre todas las aves. Ya el virus del Nilo hizo su aparición en nuestras tierras, el estrago que causó fue menor del esperado. La gripe aviar, por su similitud a influenza humana y porcina puede convertirse en una amenaza a la población humana. Ya México sufrió las consecuencias económicas de una epidemia originada en el estado de Veracruz. Si se diera una epidemia entre las aves de corral de China en momentos de la migración hacia el norte de muchas aves, la población mundial de muchas especies pudiera verse afectada. En los descansos migratorios en China las aves pudieran contaminarse en camino a las partes más norteñas de Europa. Allí, esas aves pudieran entrar en contacto con las aves que migran a América del Norte. Esto puede significar la muerte de millones de aves, la extinción de varias especies y un riesgo a la salud humana.

Sonora tiene tres codornices que comparten o compartieron hábitat. La codorniz mascarita desapareció de su hábitat al ser modificado por la presencia primero de vacas y después por el zacate buffle, utilizado para alimentar a estas últimas. Tal vez exista en algún resquicio de flora nativa, por el momento se considera extinta en vida libre, aunque existe una población en cautiverio. Las otras dos especies la codorniz cresta-dorada y la codorniz chiquiri ocupan hábitats que comparten con el ganado vacuno. Siempre que los ganaderos sigan obteniendo buenas ganancias por el ganado alimentado por pastos naturales, estas codornices seguirán poblando estos ranchos. No es aventurado suponer que si además las codornices se pueden convertir en alimento para restaurantes o sujetos de caza, el buen manejo del hábitat puede traer un mejor hábitat donde haya ganancias sustentables para los rancheros y se pudiera reintroducir la mascarita.

Un ave endémica a California y Baja California, el tordo tricolor, anida en grandes colonias cerca a fuentes de agua, ya sea naturales o represos. Las colonias pueden moverse de un año a otro, a veces anidan en campos agrícolas y las colonias no alcanzan el éxito reproductivo por que la maquinaria de cosecha destruye los nidos. De haber cientos de miles y encontrarse hasta El Rosario, se han contado menos de cien aves en el norte de Baja California. Dejar crecer unos cuantos tulares en represos y fuentes naturales ayudará a que esta ave tan vistosa vuelva a ser parte significativa del paisaje de Baja California. 

La sequía de este año ha sido crítica para las aves La Perlita californiana , al igual que otras aves residentes de la zona mediterránea, no han anidado. No hay suficientes recursos para que la reproducción sea exitosa. Las aves migratorias que generalmente viajan al norte por las montañas de la península están pasando por tierras bajas del Pacífico donde las condiciones son más favorables que en su corredor habitual.

Lograr que las poblaciones de aves se recuperen o se mantengan no se logra con buenos deseos o políticas equivocadas o poco realistas. Podemos cambiar nuestros jardines para que sean atractivos para aves nativas y migratorias. Debemos cambiar nuestros hábitos de consumo para reducir nuestro impacto en nuestra comunidad y nuestro planeta y hacerlo más habitable para todos. 


Además pido que se encuentre y castigue a los culpables intelectuales y materiales de los asesinatos de Miroslava Breach y Javier Valdéz y el secuestro de los 43 normalistas de Ayotzinapa.