o
comparar objetos, opciones u otras cosas.
Los
vientos de Santana, conocidos y sufridos por los habitantes de esta
región, son catabáticos, es
decir que descienden, asociados a un sistema de alta presión sobre
la Gran Cuenca Nevada. Esta
es una altiplanicie árida de clima continental del Oeste de los
Estados Unidos que se extiende
de la Sierra Nevada a las Rocallosas. Los vientos de Santana se
calientan adiabáticamente
al comprimirse por el aumento de la presión atmosférica sin pérdida
de calor. Este
descenso con ganancia de calor produce vientos muy secos y calientes
que pueden alcanzar
velocidades huracanadas. Los efectos destructivos que acompañan a
los incendios provocados
por estos vientos son de triste recuerdo.
Godzila,
un monstruo mejor conocido que los vientos de Santana, es una
pesadilla y metáfora derivada
de las explosiones nucleares en Hiroshima y Nagasaki; su poder
proviene de esa energía
nuclear. Godzila deriva su nombre de la combinación de gorila y
ballena, es una quimera.
Godzila es un monstruo anfibio que aunque destructivo, en ocasiones
es el menor de los
males. Su presencia en el cine desde 1954 la han sufrido innumerables
veces en Tokio y otras
grandes urbes.
A
Godzila y los vientos de Santana los unen su poder destructor y el
horror que causan. El
horror
es consecuencia de su poder destructor y su poder es consecuencia de
la energía que contienen
y desplegan. El poder de Godzila se manifiesta en la facilidad con
que destruye urbes y
vidas humanas. Lo mismo podemos decir de los vientos de Santana
cuando su fuego se acerca a
las construcciones.
Suponiendo
para nuestra discusión que ambos obedecen las leyes de la física,
requerimos de fuerzas
iguales o mayores para combatirlos. Aquí empiezan nuestros
problemas. No conocemos la
cantidad de energía nuclear que ha absorbido Godzila, lo que nos
dificulta equiparar sus fuerzas.
Si lo supieramos o lo pudiéramos estimar, Godzila y la película
serían de vida muy corta.
Además no tendríamos el gran despliegue de efectos especiales y
ejércitos inútiles que lo acompañan
en cada película.
Los
vientos de Santana y sus fuegos también son grandes paquetes de
energía, cuya magnitud puede
ser calculada pero no extinta. Generalmente en el sur de California
los grandes despliegues
de bomberos son inútiles para cancelar la energía de los fuegos y
la destrucción es noticia
de primera plana. Nuestro paisaje irregular y sin combate efectivo de
incendio reduce nuestra
vulnerabilidad. El fuego disminuye o se extingue cuando cambian las
condiciones climáticas
o no hay nada que quemar, independientemente de esfuerzos y
presupuestos. ¿Podemos
combatirlos? Godzila nos acompañará a través de cambios
tecnológicos en el cine.
Los fuegos de los Santana no se pueden eliminar, pero podemos adaptarnos a ellos. Vivimos en una región mediterránea donde la descomposición orgánica se hace por fuego. La mayoría de las plantas son pirófilas, necesitan del fuego para completar su ciclo de vida. Promueven el fuego al contener aceites y otras substancias aromáticas flamables. Este ecosistema apareció antes que llegaran los humanos . Los primeros habitantes adaptaron su forma de vida y manejaban los fuegos para hacerse de alimento y otros recursos.
Nuestra
forma de vida ya no depende del fuego. Podemos disminuir su daño a
bienes raíces yvidas
humanas. Para evitar daño por fuegos hay que construir lejos de la
vegetación nativa o clarear
un área alrededor de la casa, también hay que evitar la basura en
el perímetro. Sin estas y otras precauciones será difícil e inútil culpar al fuego o a Godzila de nuestras pérdidas
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